LOS POEMAS DE DAICHI: 48. To setsu ken — La ermita de To

 

La gran sentada (el gran sentarse) de esta casa es la práctica de la verdadera enseñanza del Buda

El método para tener un contacto con alguien está más allá del sentido ordinario.

No se trata de inteligencia o no inteligencia, 

El visitante observa con ecuanimidad que el color de la montaña es azul.

 

To, significa igual, semejante; setsu, contacto, tocar, entrevista, encuentro; ken, casa, ermita.

 

Realizar el zen de Buda, como dice Yoka Daishi en el Shodoka es el gran sentarse de esta casa del Zen Soto. Shikantaza es la verdadera enseñanza del Buda. Conocer/recitar los sutras sin practicar zazen no sirve de nada, solo es conocimiento no realizado.

La práctica de shikantaza es esencial. El método para tener contacto con alguien, fuera del sentido común ordinario, más allá de la educación. La comprensión de la enseñanza de los sutras, del mundo y de la vida viene a partir de zazen. Es la experiencia de zazen la que nos enseña la Vía. No se puede entender realmente si no se hace zazen, queda solo el intelectualismo. No se trata de una enseñanza universitaria.

 

Hay tres métodos de educación:

Haju: asir, atrapar.

Hoko: soltar, liberar, como atrapar un pez y soltarlo, dejarlo ir libremente.

Setoku: cortar el karma.

Así, con algunos discípulos hay que utilizar el método hoko: haced lo que queráis, no importa, entended por vosotros mismos. Pero en ocasiones es necesario cortar el karma, las malas características. Esto a veces no gusta a la gente que viene a practicar zazen, no lo aceptan.

Los tres métodos son básicos para el maestro y también para el discípulo. En la educación hay que alternar siempre los tres. A veces es como queréis: “Oh, el kyosaku… Oh, el kusen…” pero en el kusen están también incluidos los tres métodos.

 

No es una cuestión de inteligencia o no inteligencia. El visitante observa con ecuanimidad que el color de la montaña es azul. El visitante es el discípulo. Aquí también influye una característica de la lengua china o japonesa: se puede decir la montaña azul o la montaña verde. Cuando se miran las montañas a lo lejos parecen azules, pero cuando se está dentro de ellas las montañas son verdes. En chino hay un ideograma para azul y verde.

 

El maestro Ejo, el sucesor de Dogen en Eihei ji, escribió en el Komyozo Zanmai, El Granero de la iluminación:

Debemos soltarnos, liberarnos en la gran luz de zazen. No hay que continuar, prolongar la conciencia. No hay que apegarse a una conciencia que se alza, no hay que perseguirla — solo concentrarse en la postura y practicar en este lugar la gran sentada. Simplemente soltar, libremente inspirar y expirar sin atarse a nada. Solamente continuar zazen.